El funeral del fallecido líder opositor ruso, Alexei Navalny, tendrán lugar, en medio de tensiones y prohibiciones, este 1 de marzo en Moscú, según anunció el equipo del político, tras denunciar durante días dificultades y amenazas para evitar que el entierro del opositor a Putin se realizara de forma abierta.
La familia del dirigente reclamó además tener dificultades para encontrar un espacio donde realizar una despedida pública al opositor.
"En todas
partes rechazaron darnos algo. En algunos lugares, nos dijeron que estaba
prohibido", explicaron familiares en un comunicado divulgado en Telegram,
criticando al "Kremlin y a Serguéi Sobianin", alcalde de Moscú,
próximo a Vladimir Putin, por sus actuaciones.
La información fue
confirmada en la red social X por la portavoz de Navalny, Kira Yarmish, quien
anunció que tanto la misa como el entierro del político finalmente podrá
realizarse en la catedral del barrio moscovita de Maryino, en el sureste de la
capital, y el sepelio en la necrópolis de Borísovo, de la misma zona.
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