Francia movilizará a 90.000 agentes de Policía y Gendarmería, de los
cuales 6.000 en París, para garantizar la seguridad y prevenir en
particular cualquier amenaza terrorista durante las fiestas para
celebrar la entrada en 2024, un año en el que la capital francesa será
sede de los Juegos Olímpicos.
El ministro francés del Interior,
Gérard Darmanin, recordó en unas declaraciones a los medios en la
presentación de este dispositivo de seguridad, que esa amenaza
terrorista sigue siendo "extremadamente fuerte".
Un dispositivo
que, como subrayó la directora general adjunta de la Policía Nacional,
Céline Berthon, pretende además garantizar la "seguridad general" para
permitir que las fiestas transcurran "sin contratiempos" y para que haya
"seguridad en las carreteras".
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