El volcán Cotopaxi, en Ecuador, continuó el viernes 28 de octubre expulsando desde su cráter una columna de gases tras haber incrementado su actividad en los últimos siete días con señales de tremor en su interior y la emisión de vapores y ceniza.
La ceniza que emitió entre el viernes y el sábado pasados alcanzó los
125 gramos por metro cuadrado, lo que puede considerarse de carácter
moderado, pero tan extremadamente fina que pueda introducirse en los
pulmones, por lo que las autoridades recomiendan usar mascarilla durante
estos eventos.
No
obstante, los expertos del IG subrayaron que hasta ahora no hay cambios
en la sismicidad ni otros aspectos que se mantienen inalterados, a
diferencia del proceso de reactivación que se registró en 2015.
En
el cráter se registró un punto caliente que ya fue detectado en varias
ocasiones desde 2015, pero no con la intensidad de ahora.
Con
estos elementos, los especialistas del IG manejan dos escenarios
posibles: uno, el más probable, que apunta a un evento relativamente
aislado y que posiblemente se mantenga como tal; y dos, que sea el
inicio de un nuevo proceso eruptivo del que no pueden determinar su
tamaño por no tener la ausencia de datos premonitores.
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