Se acaba de presentar el proyecto para construir el nuevo rascacielos Lakhta Center II de San Petersburgo. Con sus 703 metros de altura, solo está por detrás del Burj Khalifa de Dubai.
No llegará a desbancar al edificio más alto del mundo, el famoso Burj Khalifa de Dubai (828 metros), pero ya ha sentado las bases para convertirse en el segundo rascacielos del planeta con sus 703 metros. El nuevo gigante estará en la ciudad rusa de San Petersburgo, tendrá 150 pisos y su diseño lo acaba de presentar el estudio de arquitectura encargado de su construcción, Kettle Collective, con sede en Escocia y cuyo responsable es el británico Tony Kettle.
También ha avanzado el nombre del futuro Récord Guinness, Lakhta Center II, puesto que ya existe el número I, una espectacular torre de 462 metros y 87 pisos que se ubica igualmente en la antigua metrópoli zarista. Ésta consiguió alzarse en 2020 con el galardón al Mejor Rascacielos del Año en los premios Emporis Skyscraper, que pasan revista cada 12 meses a los más impactantes sobre la faz de la Tierra.
El nuevo edificio sí logrará vencer al Burj Khalifa en algo, ya que contará con el piso ocupado más elevado del planeta (a 590 metros sobre el suelo, mientras que el dubaití está a 585 metros), donde se situará un mirador con vistas panorámicas en su planta 150, que será también el más alto del mundo.
El Lakhta Center II se ubicará junto al I, construido en 2018 y ocupado por la compañía de gas rusa Gazprom (igual que el II), convirtiéndose en el edificio más descomunal de Rusia y el más alto de Europa. Lo firmó el estudio RMJM, del que también es responsable Kettle, aunque su nuevo retoño lo ha planificado desde otra de sus empresas, Kettle Collective. Eso sí, todavía no hay fecha prevista para la inauguración.
El futuro Récord Guinness hará que descienda posiciones el que ahora mismo está considerado el segundo rascacielos más alto del mundo, la Torre de Shanghai, aupada a 632 metros. En cuanto al diseño, mientras que el Lahkta Center I representa una llama ardiendo giratoria que se eleva hasta el cielo, el II tendrá forma helicoidal y rendirá homenaje a las iglesias de San Petersburgo al acabar de manera puntiaguda.
La torre tendrá uso tanto residencial como comercial, además de contar con espacio para oficinas, aparcamientos y numerosas zonas verdes en claro contraste con el acero y el vidrio que se utilizará en su construcción. No en vano, Kettle quiere que sea un modelo perfecto para "para vivir, trabajar y jugar". La sostenibilidad y el bajo consumo energético serán claves. De ahí que el movimiento a través de la torre se lleve a cabo a través de vehículos eléctricos multifuncionales.
El propio Kettle ha avanzado en la presentación que el diseño será estético y funcional, "ya que reducirá las fuerzas del viento que impacten en la estructura, limitando el número de elementos estructurales que se necesitan dentro del edificio". El motivo de inspiración fue la "energía en todas sus formas" a través de unas columnas en espiral que "crean una cuadrícula helicoidal orgánica abierta".
No hay comentarios:
Publicar un comentario